3 de Marzo de 2008

La defensora del pueblo de la ciudad, Alicia Pierini, denunció penalmente al comisario y los agentes de la seccional 33a. de la Policía Federal por presunto abuso de autoridad, privación ilegítima de la libertad, lesiones y violación de los deberes de funcionario público durante el desalojo de los cartoneros de Barrancas de Belgrano, el viernes pasado.
 

En su presentación, que –según informó la defensoría– quedó radicada en el Juzgado de Instrucción N° 49, a cargo del juez Facundo Cubas, Pierini sostiene que, durante el operativo, se reprimió y se detuvo "en forma violenta y excesiva a personas adultas y menores", sin intervención ni orden judicial para desalojar.

Efectivamente, sólo hubo una resolución del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño, que ordenó "la desocupación administrativa de los ocupantes del predio" y "el retiro de todas las instalaciones de los cartoneros" por las condiciones precarias de seguridad existentes en el lugar.

Los cartoneros acampaban allí, al igual que en otros puntos, desde que se canceló el servicio del tren blanco.

Por lo expuesto, Pierini –que decidió actuar tras recibir denuncias de los damnificados– solicitó a la Justicia que cite a declarar al jefe de la 33a., comisario Julio César Fernández, para que informe "quién dio la orden de intervenir y quién determinó la metodología empleada".

Ante la denuncia, el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, admitió haber sido él quien aprobó la intervención policial ante la posibilidad "de que hubiera riesgo de vida".

"A las 5.45 [del viernes] di instrucción porque no íbamos a llegar a un punto donde pusiéramos en riesgo la vida de nadie", relató. En ese sentido, explicó que los efectivos de la comisaría 33a. reportaron la presencia de "una camioneta del gobierno porteño rociada con nafta, bidones con combustible y chicos y mujeres rodeados por un alambrado que impedía la salida" si se producía un incendio. Telam