11 de Mayo de 2009
El control del espacio
público
Seguridad urbana: un negocio millonario que
se decide a dedo
Los intendentes bonaerenses contratan, sin
licitación, cámaras de vigilancia y el control satelital de
patrulleros. Este año gastarán $ 400 millones. El Gobierno
impone una empresa. Qué pasa en Capital.
Calles, plazas y comercios controlados por
miles de cámaras de vigilancia, sistemas satelitales para el
seguimiento de patrulleros, centros de monitoreo de todo el
sistema con sofisticadas computadoras. La tecnología para el
control público urbano se está volviendo habitual en la
ciudad de Buenos Aires, en casi todos los municipios del
conurbano y en muchas capitales provinciales. Son
respuestas a los reclamos sociales, pero también esconden un
formidable negocio, de cientos de millones de pesos al año,
que está siendo asignado a dedo.
¿Dónde, quiénes lo asignan? La trama
involucra a actores políticos y a empresarios, algunos
conocidos y otros casi fantasmales. Por supuesto que
también a los ciudadanos, que pagan y pagarán con sus
impuestos estos remedios al miedo colectivo. Fue la ciudad
de Buenos Aires, en 2006, el lugar de inicio de los grandes
negocios de las cámaras de vigilancia en la vía pública ,
pero en éstos días se están firmando decenas de convenios
millonarios en el conurbano bonaerense. Sólo en las últimas
dos semanas, el gobierno nacional giró 70 millones de
pesos para que los intendentes compren cámaras de
vigilancia, equipos de monitoreo y coches patrulla para sus
municipios. Lo que no se dice es que buena parte de esos
fondos serán invertidos eludiendo licitaciones públicas y
procesos de competencia, según reconocen en el propio
gobierno bonaerense, el gran impulsor de estas decisiones.
"Eso depende de cada municipio, aunque es cierto que no
podemos esperar más tiempo. Pero sí, lo ideal hubiera sido
una licitación provincial", resume Néstor Franco,
director general del ministerio de Seguridad de la
Provincia. Los tiempos que impone Franco no dejan lugar a
variables: en dos meses quiere al sistema de video
vigilancia funcionando en todo el conurbano y pretende que
esté todo coordinado antes de fin de año.
Esos 70 millones a invertir en equipamiento
de seguridad, son parte de los 400 millones extraordinarios
que anunció el gobierno nacional a fines de marzo para
auxiliar a Daniel Scioli en la lucha contra el delito. La
plata ya empezó a llegar a Ituzaingó, José C. Paz, Cañuelas,
Luján, Quilmes, Hurlingham, San Miguel, Zárate, La Matanza y
Lanús. Pero según comprobó Clarín, los fondos llegan a
condición de ciertos compromisos, como la contratación de la
empresa que se hará cargo del control satelital de los
nuevos móviles de cada jurisdicción. La recomendada se llama
Ubik2 y, si el negocio avanza como está previsto, acabará
facturando no menos de 4,8 millones de pesos al año, ya que
los patrulleros o móviles que piensan sumarse a la actual
flota son cerca de 2.000 y a todos habrá que ponerles un
sistema de seguimiento, que se cotiza a no menos de 200
pesos mensuales por vehículo, sin contar la instalación
inicial. Todo eso, sin haber tenido que pasar por una
compulsa de precios y a pesar de ser más cara que otras
empresas.
Fuentes de tres muncipios consultadas por
Clarín admitieron que la contratación de Ubik2 es condición
para la firma de los convenios; es decir, para recibir la
plata prometida por el gobierno nacional. Así lo reconoció,
entre otros, el secretario de gobierno de Ituzaingó, Alfredo
Almeida: "Dijeron que todos teníamos que tener los mismos
equipos para poder homologarlos en el futuro. Y parece
razonable", contó a Clarín. Ya firmaron el convenio con
Ubik2, además de Ituzaingó, Florencio Varela y el Municipio
de la Costa. Pronto lo harán los demás. Ya hay 18 municipios
que firmaron el convenio para entrar al plan de auxilio de
fondos.
Esta es la explicación de Franco sobre la
empresa recomendada: "Nosotros no imponemos nada, ellos se
lo autoimponen porque la empresa funcionó muy bien en
Ezeiza". El funcionario sabe de lo que habla, porque en 2003
era Secretario de seguridad del municipio de Ezeiza y fue
quien instaló el primer sistema de monitoreo satelital de
los patrulleros. Había contratado a Ubik2, firma que, de
acuerdo a la declaración pública de su directorio, está
dirigida por dos jóvenes empresarios, Rodrigo Campbell y
Cintia Madeira Ciotta. En realidad, Ubik2 no existía como
tal. De acuerdo al Registro de Marcas de la Nación, se
registró recién el 9 de mayo del 2008, pocos meses después
de la asunción de Daniel Scioli en la Provincia. UbiK2 es
una firma casi desconocida en el mercado, y ni siquiera
integra la Cámara de empresas de seguimiento satelital.
La explicación sobre esa "imposición" o
"autoimposición", obedece a la teoría de la compatibilidad.
Si todo el conurbano va a tener sistemas de cámaras de
seguridad y patrullajes controlados, deben estar vinculados
por un sistema que permita unificarlos. ¿Por qué entonces no
llamar a una licitación provincial y convocar a una sola
empresa? Porque no hay tiempo, dicen en el gobierno de
Scioli. En el año 2000, la misma provincia había contratado
a una empresa que instaló dispositivos satelitales en todos
los patrulleros. Aquella vez lo había hecho por licitación y
había ganado otra empresa, llamada Megatrans, en realidad la
única oferente. Esa misma empresa todavía hace el
seguimiento de casi 5.000 patrulleros de la Policía
bonaerense, pero ha sido dejada afuera del seguimiento de
los vehículos que se comprarán ahora. Megatrans logró
quebrar la veda sólo en el municipio de Morón, que se negó a
aceptar las sugerencias del gobierno provincial. Una pista:
le cobrará al municipio un pago mensual de 4.550 pesos,
mientras que Ubik2 pretendía cobrar 9.786 pesos por mes, más
del doble, además de 48 mil pesos por la instalación del
servicio.
La parte más espectacular del negocio son,
sin duda, las cámaras de seguridad. El plan bonaerense prevé
la instalación de 5.000 cámaras en toda la provincia, que
deberán controlar las principales arterias y los puntos más
conflictivos de cada municipio. Para eso calculan gastar 205
millones de pesos del envío extraordinario del gobierno
nacional. Cada municipio debe instalar entre 39 cámaras (en
Ituzaingó, una jurisdicción pequeña) y 400 (en La Matanza),
de acuerdo a sus dimensiones.
En al menos dos de los 33 municipios
incluidos en el programa, San Isidro y Morón, dijeron a
Clarín
que fueron
presionados para contratar determinadas empresas. No hay,
sin embargo, fuentes que lo digan en forma abierta y el
gobierno bonarense lo niega. De acuerdo a empresarios del
sector, son entre 5 y 10 las firmas capacitadas para hacer
el trabajo y no deberían pelear entre ellas porque hay
suficiente mercado para todas. La ecuación parece cierta ya
que no hay empresa que en el corto plazo puedan instalar
tantas cámaras.
Una de las firmas más comentadas hoy día en
los municipios, es la empresa Global View, de Mario Montoto,
ex montonero devenido empresario que es pionero en el
mercado del control por videocámaras. Montoto ya colocó
miles de cámaras en todo el país y está operando el sistema
en Tigre, Campana, Lomas de Zamora, y tiene proyectado
hacerlo en Mar del Plata y en al menos cuatro municipios
más, según dice la propia empresa. También en la ciudad de
Buenos Aires, aunque allí Montoto lo hace con otra empresa,
Codesur, que trabaja para el gobierno porteño desde hace
tres años. En todos esos casos, los acuerdos con los
municipios se hicieron por convenio directo, sin licitación
pública o cotejo de ofertas.